Gastronomía

Alimentando los cinco sentidos

Fuente del Arco, infinitas razones para comer bien

Por sabrosa, por saludable, por tradicional, por variada, porque se puede descubrir nuevos sabores, porque se disfruta en los restaurantes y de elaboraciones ancestrales… La gastronomía de Fuente del Arco te transportará a diferentes momentos. Además, es saludable y un ejemplo de dieta mediterránea como nuestro ingrediente estrella, el jamón ibérico, orgullo nacional. 

Típica gastronomía

La gastronomía de Fuente del Arco, como la de otras poblaciones de la comarca, está presidida por la elaboración de jamones y embutidos de excelente calidad y curados en óptimas condiciones que proporcionan el enclave en la serranía donde se halla la población.

 

Platos tradicionales: escabeche de verduras, caldereta extremeña, migas y gazpacho (en verano). También destacan las carnes de caza, los espárragos, las setas y los peces.

En repostería destacan: roscos, gañotes o pestiños, flores, (dulces con miel), rococó (brazo de gitano), perrunillas y melendres, estos últimos elaborados con huevo, harina, matalauva y azúcar.

Algunas de las recetas más típicas

Para tres kilos de Lechón.

INGREDIENTES:

  • 1 Cabeza de ajos.
  • 1 Puñado de sal.
  • 1 Cucharada de pimentón.
  • 1 Ramillete de tomillo y orégano.
  • 1 Litro de vino blanco.
  • 1 Vaso de Aceite

ELABORACIÓN:

Machacar los ajos con la sal, el pimentón, orégano y tomillo, y desacer en un poco de agua. Incorporar al lechón el machado y el vino.

Dejar macerar 24 horas. Remover de vez en cuando.

En una cazuela se pone el aceite y echamos el lechón con su adobo. Remover y dejar hasta que esté tierno y se haya consumido el vino.

Para 10 personas.

INGREDIENTES:

  • Aceite de oliva virgen extra para la masa70 ml
  • Cáscara de limón para aromatizar el aceite
  • Azúcar para espolvorear
  • Miel para bañarlos
  • Semillas de anís o matalahúva al gusto
  • Vino blanco70 ml
  • Aceite de oliva virgen extra abundante para freír los pestiños
  • Harina de trigo250

ELABORACIÓN:

Comenzamos aromatizando el aceite para lo cual lo calentamos en una sartén con un trozo de cáscara de limón dentro. Una vez que se ha dorado ésta y el aceite esté bien caliente se retira la cáscara y se añaden los anises. Apagamos el fuego y dejamos que el aceite se enfríe a temperatura ambiente.

En un cuenco grande se pone la harina y se mezcla con el aceite ya frío mezclado con el vino blanco. Se amasa mezclando bien hasta obtener una masa fina que se desprenda de las paredes del recipiente, dejando la masa después reposar media hora cubierta con un paño.

Extiende la masa con el rodillo hasta que tenga el grosor de una moneda. Después se corta en tiras de unos 4 cm y después en cuadrados. Cada cuadrado lo transformamos en el clásico pestiño, doblando hacia dentro las puntas y pegándolas con una gota de agua. Dejamos reposar durante 30 minutos antes de freírlos.

Calienta una sartén con abundante aceite y fríe los pestiños por tandas, dándoles la vuelta para que se doren por igual. Cuando estén bien fritos, escurre los pestiños sobre papel de cocina y pasa por una mezcla de miel con unas cucharadas de agua, calentada brevemente al fuego o si lo prefieres, espolvoréalos con azúcar.

INGREDIENTES:

  • 3 Huevos.
  • 100 gr. de harina.
  • 100 gr. de azúcar.
  • 1 Cucharada de levadura Royal.

ELABORACIÓN:

Precalentar el horno a 170º.

Batir las yemas con el azúcar hasta que estén cremosas; añadir la harina tamizada con la levadura, mezclar bien e incorporar las claras a punto de nieve.

Verter sobre la bandeja del horno forrada con papel de horno. Cocer entre 10 y 15 minutos, hasta que el bizcocho esté firme al tacto. Al sacarlo del horno queda así, un bizcocho muy esponjosito.

Sacamos con cuidado del papel el bizcocho y lo ponemos encima de un trapo y lo enrollamos mientras todavía está caliente para que vaya cogiendo la forma.

Dejar así hasta que se enfríe del todo.

Una vez frío rellenad de lo que queráis, normalmente de chocolate, flan o cabello de ángel.